Hace cuatro años un grupo de campesinos caficultores de la vereda La Betulia del municipio de La Unión, le dio vida a la empresa Cafetera Santa Ana cuyo producto: el Café de mi Tierra, hoy es reconocido a nivel nacional.
El objetivo propuesto fue gestionar y desarrollar proyectos productivos comunitarios orientados a la explotación técnica, sustentable y sostenible de predios rurales que se destinen a la producción agropecuaria con énfasis en café especial. Todo esto con el fin de contribuir al desarrollo empresarial social y cultural de la región, a través de trabajo asociativo y de la autogestión.
Esta iniciativa surge gracias al acompañamiento del SENA y a partir de la necesidad de producir, transformar y comercializar el café de La Unión, lugar que hoy es considerado uno de los mejores productores de cafés especiales del país. El carácter de café especial lo ofrece la tierra de forma natural, gracias a la compenetración del campesino con el medio ambiente y las técnicas limpias de producción y beneficio.
Actualmente la empresa emplea a cinco personas entre operarios distribuidores e impulsadores qua a diario se encargan de distribuir café tostado en pepa y café molido en presentaciones de libra, media libra y cuarto de libra. Adicionalmente ofrecen dos calidades: una para paladares más exquisitos y conocedores del café gourmet tipo exportación y otra para aquellos que gustan de un café más económico.
Este café se caracteriza por su suavidad con alta acidez y un carácter delicado que inspira lo femenino. Se destacan sus matices florales, achocolatados, frutales y dulces que hacen que su calidad, aroma y sabor sean inigualables.
Este proceso ha estado apoyado permanentemente por el SENA, quien ofreció formación en las áreas de comercialización, mercadeo, exportación y catación, lo que inicialmente les permitió consolidar la idea de negocio y buscar formas de fortalecimiento empresarial y comunitario. Es el caso de la alianza creada con las mujeres artesanas del municipio de La Unión, quienes se dan a la tarea de elaborar los estuches para el café en paja toquilla.
Hoy el Café de mi tierra se comercializa en los principales supermercados de La Unión y Pasto, con una gran acogida debido a la calidad del producto, cuyo empaque hermético conserva sus propiedades y características organolépticas y fue recomendado por la Federación de Cafeteros de Colombia. Estos cafeteros que le apostaron a hacer empresa aseguran que el próximo año el Café de mi tierra será conocido a nivel nacional, compromiso en el que está comprometido el SENA Regional Nariño.
El objetivo propuesto fue gestionar y desarrollar proyectos productivos comunitarios orientados a la explotación técnica, sustentable y sostenible de predios rurales que se destinen a la producción agropecuaria con énfasis en café especial. Todo esto con el fin de contribuir al desarrollo empresarial social y cultural de la región, a través de trabajo asociativo y de la autogestión.
Esta iniciativa surge gracias al acompañamiento del SENA y a partir de la necesidad de producir, transformar y comercializar el café de La Unión, lugar que hoy es considerado uno de los mejores productores de cafés especiales del país. El carácter de café especial lo ofrece la tierra de forma natural, gracias a la compenetración del campesino con el medio ambiente y las técnicas limpias de producción y beneficio.
Actualmente la empresa emplea a cinco personas entre operarios distribuidores e impulsadores qua a diario se encargan de distribuir café tostado en pepa y café molido en presentaciones de libra, media libra y cuarto de libra. Adicionalmente ofrecen dos calidades: una para paladares más exquisitos y conocedores del café gourmet tipo exportación y otra para aquellos que gustan de un café más económico.
Este café se caracteriza por su suavidad con alta acidez y un carácter delicado que inspira lo femenino. Se destacan sus matices florales, achocolatados, frutales y dulces que hacen que su calidad, aroma y sabor sean inigualables.
Este proceso ha estado apoyado permanentemente por el SENA, quien ofreció formación en las áreas de comercialización, mercadeo, exportación y catación, lo que inicialmente les permitió consolidar la idea de negocio y buscar formas de fortalecimiento empresarial y comunitario. Es el caso de la alianza creada con las mujeres artesanas del municipio de La Unión, quienes se dan a la tarea de elaborar los estuches para el café en paja toquilla.
Hoy el Café de mi tierra se comercializa en los principales supermercados de La Unión y Pasto, con una gran acogida debido a la calidad del producto, cuyo empaque hermético conserva sus propiedades y características organolépticas y fue recomendado por la Federación de Cafeteros de Colombia. Estos cafeteros que le apostaron a hacer empresa aseguran que el próximo año el Café de mi tierra será conocido a nivel nacional, compromiso en el que está comprometido el SENA Regional Nariño.
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